miércoles, 23 de marzo de 2011

Próximos conciertos ABRIL

Seguimos en abril con más conciertos, esta vez, en una geografía más extensa.

1  ABRIL            CASAL DE CAN BUTJOSA (Parets del Vallès, con banda)
5  ABRIL            BUHO REAL (con Miguel Ángel Bueno)
12 ABRIL           CAFÉ SANTA ANNA (SALAMANCA)
19  ABRIL          LIBERTAD 8 (con Pepe Curioni)
21 ABRIL           LA FADA IGNORANT (ANDORRA)
22 ABRIL           UNDERGROUND (con Cómplices de la realidad)
28 ABRIL           MACONDO

martes, 1 de marzo de 2011

Quién es Vico?, según Mario Boville

Empecemos hablando de Vico como quien habla de esa estrella de rock que el mundo todavía no ha descubierto (tiempo al tiempo); como un Barcelonés que llenó sus maletas con todas las canciones que tenía y se cogió un autobús a Madrid a buscar fortuna, sin saber lo difícil que es ser profeta en la tierra de los sordos. Pero Vico no se rinde, no. Es como una pequeña hormiga, un artesano tranquilo que teje lentamente la manta que le cobijará en el futuro, una manta hecha de acordes y canciones. “Siempre digo lo que pienso” dice en una de sus letras, y si hay algo en este chico, ese algo es la honestidad brutal de alguien que no sabe (o no quiere) engañar a nadie, que te pone en crudo ese repertorio de Caricias y Navajas con una sensibilidad sorprendente, sin que le tiemble el pulso. Y cuando alguien trae un puñao de su verdad, lo derrama sobre la mesa y te mira a los ojos, y ves que canta y escribe esas canciones porque probablemente no sabe (o no quiere) hacer otra cosa en su vida, entonces uno siente un escalofrío, uno siente que el arte está vivo aún en algunas personas y, hacedme caso amigos, eso es una gran noticia para la humanidad.


 Invocando a los espíritus del más puro rock español, Vico se hace un hueco en el arduo panorama musical a base de lucha, trabajo y rock n´ roll. Yo mismo le he visto estar en cuatro barrios distintos la misma noche, haciendo la religiosa ronda de los bares, buscando quizás a la musa o solamente un poco de compañía para no pasar el rato solo con sus demonios; le he visto pasear solo por las calles del centro, bajo la lluvia, como un ermitaño en medio del hormiguero, y quizá por eso su música tiene ese tono melancólico, solitario, de amor imposible, de hojas que se lleva el viento; quizá por eso en el escenario inspira esa ternura que engancha, esa empatía que me provocó cuando le vi por primera vez en Monasterio, en Barcelona. Y no debe ser casualidad porque el rock, para Vico, es una religión a la que será fiel hasta su muerte, de eso no hay duda.

De Mario Boville, amigo, músico y poeta